Qué placer más grande sentimos
cuando nos invade la sensación plácida de un recuerdo,
que nos llega de forma casual,
ese aroma, los colores
o una caricia pasada.
cuando nos invade la sensación plácida de un recuerdo,
que nos llega de forma casual,
ese aroma, los colores
o una caricia pasada.
Qué placer cuando nos llegan esas sensaciones
construidas de la materia intangible de la que están hechos los recuerdos,
esa sensación dulcemente vivida o ese sentimiento exaltado,
aunque sólo sea en la memoria,
en ese lugar lejano donde habitan los sueños.
La nostalgia no es triste,
lo realmente triste es no tener nada que añorar.
construidas de la materia intangible de la que están hechos los recuerdos,
esa sensación dulcemente vivida o ese sentimiento exaltado,
aunque sólo sea en la memoria,
en ese lugar lejano donde habitan los sueños.
La nostalgia no es triste,
lo realmente triste es no tener nada que añorar.
"no recuerdo los días,
recuerdo los momentos"
recuerdo los momentos"
No hay comentarios:
Publicar un comentario